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| La iglesia Saint Vicente Ferrer donde trabajaban los dos sacerdotes. |
Un sacerdote católico estadounidense acusado de usar el dinero de fieles de su iglesia en viajes de lujo, apuestas en casinos de Las Vegas y otros placeres alejados de su labor religiosa, se declaró culpable el miércoles en una corte de Florida (sureste de Estados Unidos).
John Skehan se declaró culpable de robo y buscará un acuerdo con los fiscales del estado para evitar una pena que podría tener un máximo de 31 años de cárcel.
Skehan y otro sacerdote, Francis Guinan, están acusados de haber malversado unos 800.000 dólares obtenidos de los fieles de su parroquia de Saint Vincent Ferrer, en Delray Beach, sobra la costa atlántica de Florida.
Los dos religiosos debían comparecer el miércoles junto a sus abogados en una Corte de West Palm Beach para el inicio del proceso de selección del jurado, pero de manera inesperada Skehan decidió declarar su culpabilidad, mientras el juicio a Guinan esta previsto que comience el 18 de febrero.
Según la acusación, los sacerdotes usaron dinero de los fieles para abrir cuentas en el extranjero con las que cubrían gastos fastuosos como la compra de una rara colección de monedas valoradas en 250.000 dólares, casas de alto nivel, viajes de apuestas a Las Vegas, y llevaban un estilo de vida 'poco santo'.
Las denuncias señalan que Guinan, de 66 años, tenía una relación "íntima" con una ex bibliotecaria y mucho del dinero robado lo usaba para sostener a su amante y llevarla en lujosos viajes de vacaciones.
El abogado de Skehan, Scott Richardson dijo que el acusado alcanzó un acuerdo "de amigable resolución" con el Estado y señaló que "el padre Skehan aceptó la responsabilidad por sus acciones en virtud de su declaratoria de culpabilidad".
El letrado agregó al finalizar la audiencia que para Skehan la apertura de una investigación en la justicia "ha sido extraordinariamente difícil desde el comienzo (...) pero cuenta con apoyo de mucha gente, muchos de los cuales van a hablar por él", en el proceso.
Por su parte el abogado de Guinan, el otro sacerdote, insistió que su cliente es inocente, y que el dinero que se le acusa de robar fue en realidad empleado para pagar a empleados de la iglesia.
"Sólo porque dos sacerdotes trabajan en la misma iglesia y uno se declara culpable no quiere decir que el otro también lo sea", dijo el letrado, Richard Barlow.Skehan fue detenido en el aeropuerto internacional de Palm Beach en septiembre de 2006 cuando regresaba de Irlanda y se le fijó una fianza de 4.000 dólares.
Junto a Guinan, habían salido de Estados Unidos después de que la iglesia iniciara una investigación por "supuestas irregularidades" en la parroquia St. Vincent, además de una auditoria en sus libros contables.
El caso vuelve a comprometer judicialmente a la Iglesia Católica estadounidense, que en los últimos años vio a muchos de sus clérigos desfilar por los tribunales por denuncias de pedofilia.
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