Cardenal defiende a alcaldes piadosos

Francisco Robles Ortega recordó que «no sólo de pan vive el hombre». Foto: Archivo

Niko:El Cardenal apoya que se viole la ley; La iglesia católica siempre con su doble moral, dando por bueno lo malo, cambiando de sermón según le convenga.

Lun, 02/06/2008

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Dice que, al fomentar el valor religioso, ayudan a la comunidad. Responder a las necesidades de la gente no es sólo hacer jorobas, subraya.

ara el cardenal Francisco Robles Ortega no hay ninguna irregularidad ni controversia en la entrega de recursos que realizan alcaldes a iglesias y parroquias, y todos los cuestionamientos al respecto no son más que “tempestades en un vaso de agua”.

El purpurado minimizó los cuestionamientos que se han realizado en torno a las dádivas económicas y en especie que alcaldes como los de Apodaca y Cadereyta han realizado con dinero del erario.

Por el contario, el religioso defendió los apoyos y aseguró que se justifican plenamente debido a que dejan un beneficio directo a la comunidad.

“A mí me parece que es hacer una tempestad en un plato, creo yo que los alcaldes, sensibles a lo que significa para las comunidades, para el pueblo, el valor religioso, también ellos están dispuestos a contribuir de alguna manera”, expresó.

Robles Ortega descartó que con estos apoyos se pretenda dar beneficios especiales a un culto o a una fe, en este caso la católica, sino que la difusión de valores religiosos dejan un beneficio en el desarrollo de la sociedad en cuanto a que difunde mensajes de paz entre la ciudadanía.

“No por favorecer un credo, un culto o una religión, lo hacen por el bien de la comunidad; el valor religioso tiene un fuerte valor pacificador en las personas”.

En ese tenor, el prelado aseguró que la difusión de estos valores sirven para que la gente haga frente a problemáticas como las crisis económica y alimentaria que atraviesan actualmente, donde lo único que les queda es su religión.

“¿De dónde sacan la fuerza tantas gentes para vivir esta tremenda crisis que estamos viviendo, crisis alimentaria y económica? A veces nada más de su fe”.

La semana pasada, MILENIO Diario de Monterrey publicó que ayuntamientos como Apodaca, San Pedro Cadereyta y Agualeguas entregaron apoyos que rondaban desde unos cuantos miles hasta varios millones de pesos a parroquias católicas.

Sin embargo, Robles Ortega fue enfático en defender estos apoyos, pues según afirmó, el valor religioso debe ser considerado un valor en general.

“Si no alcanzamos a considerar como un valor, el valor religioso, entonces hagamos piedras y piedras y piedras, y ya estamos edificando la comunidad; hagamos puentes y jorobas y ya estamos respondiendo a las necesidades de la comunidad.

“Yo insisto que la comunidad siente una necesidad de atender este aspecto de su vida, entonces destinar un poco de recursos a este renglón es beneficiar a la sociedad, porque recordemos que no sólo de pan vive el hombre”.