17-Agosto-08
Aseguró que no se oponen al uso de la minifalda Foto: Iván Carmona
El encargado de la Pastoral Social de la Diócesis de Nezahualcóyotl, Héctor Carabantes Piñón, rechazó que la Iglesia esté en contra de las modas, "lo que se pide es que la mujer sea recatada y vista prendas de forma adecuada que no provoquen la lujuria de los mexicanos"; esto lo anunció luego de las críticas que legisladores hicieran a la declaración del sacerdote Sergio G. Román.
El encargado de la Pastoral Social de la Diócesis de Nezahualcóyotl, Héctor Carabantes Piñón, rechazó que la Iglesia esté en contra de las modas, "lo que se pide es que la mujer sea recatada y vista prendas de forma adecuada que no provoquen la lujuria de los mexicanos"; esto lo anunció luego de las críticas que legisladores hicieran a la declaración del sacerdote Sergio G. Román, quien escribió un artículo de reflexión donde fijaba su postura de estar en contra de las modas.
Al señalar que no se oponen al uso de la minifalda, criticó la actitud de los legisladores, sector que levantó la voz ante el punto de vista del padre.
Admitió que la Iglesia está en contra de los excesos, por lo que hizo un llamado a la población a ser precavidos "y que la moda no nos absorba".
"Oficialmente la Iglesia no tiene ningún catálogo de determinar cuál es una prenda mora o inmoral, mucho menos que califique que la minifalda es inmoral o las modas son inmorales", destacó.
El padre criticó la actitud de los legisladores del Congreso de la Unión, quienes de inmediato levantaron su voz para protestar por la actitud que asumió el sacerdote Sergio Román, quien publicó un artículo de reflexión, pero a título personal, donde señalaba que la Iglesia estaba en contra de las modas.
"Los diputados se deben de dedicar a su trabajo y dejar de criticar a la Iglesia, pues hay muchas cosas más importantes que ellos deben de analizar, como el asunto de la inseguridad", reclamó.
Criticó el actuar de los representantes populares, "ya que no pueden hacer nada desde la curul sobre temas de seguridad y secuestros".
Puso como ejemplo el caso reciente de un menor de 14 años, hijo de un empresario de venta de artículos deportivos: "cuántos secuestros no ha habido y nada han hecho para remediarlo, eso es lo que les debería de preocupar".
Finalmente, expuso que en su cargo de Pastoral Social, la iglesia de Nezahualcóyotl haría el llamado a la mujer para que vista en una forma adecuada y no ser provocativa, ya que el mexicano como hombre y en su psicología es lujurioso, curioso y máxime si se ve en las provocaciones que le genere una mujer.
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El encargado de la Pastoral Social de la Diócesis de Nezahualcóyotl, Héctor Carabantes Piñón, rechazó que la Iglesia esté en contra de las modas, "lo que se pide es que la mujer sea recatada y vista prendas de forma adecuada que no provoquen la lujuria de los mexicanos"; esto lo anunció luego de las críticas que legisladores hicieran a la declaración del sacerdote Sergio G. Román.
El encargado de la Pastoral Social de la Diócesis de Nezahualcóyotl, Héctor Carabantes Piñón, rechazó que la Iglesia esté en contra de las modas, "lo que se pide es que la mujer sea recatada y vista prendas de forma adecuada que no provoquen la lujuria de los mexicanos"; esto lo anunció luego de las críticas que legisladores hicieran a la declaración del sacerdote Sergio G. Román, quien escribió un artículo de reflexión donde fijaba su postura de estar en contra de las modas.
Al señalar que no se oponen al uso de la minifalda, criticó la actitud de los legisladores, sector que levantó la voz ante el punto de vista del padre.
Admitió que la Iglesia está en contra de los excesos, por lo que hizo un llamado a la población a ser precavidos "y que la moda no nos absorba".
"Oficialmente la Iglesia no tiene ningún catálogo de determinar cuál es una prenda mora o inmoral, mucho menos que califique que la minifalda es inmoral o las modas son inmorales", destacó.
El padre criticó la actitud de los legisladores del Congreso de la Unión, quienes de inmediato levantaron su voz para protestar por la actitud que asumió el sacerdote Sergio Román, quien publicó un artículo de reflexión, pero a título personal, donde señalaba que la Iglesia estaba en contra de las modas.
"Los diputados se deben de dedicar a su trabajo y dejar de criticar a la Iglesia, pues hay muchas cosas más importantes que ellos deben de analizar, como el asunto de la inseguridad", reclamó.
Criticó el actuar de los representantes populares, "ya que no pueden hacer nada desde la curul sobre temas de seguridad y secuestros".
Puso como ejemplo el caso reciente de un menor de 14 años, hijo de un empresario de venta de artículos deportivos: "cuántos secuestros no ha habido y nada han hecho para remediarlo, eso es lo que les debería de preocupar".
Finalmente, expuso que en su cargo de Pastoral Social, la iglesia de Nezahualcóyotl haría el llamado a la mujer para que vista en una forma adecuada y no ser provocativa, ya que el mexicano como hombre y en su psicología es lujurioso, curioso y máxime si se ve en las provocaciones que le genere una mujer.
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