Martes 4 Septiembre del 2012
Mario Mora Legaspi
Aguascalientes, Ags.- La Iglesia Católica acepta y reconoce el fallo del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, por lo que es prudente brindar el apoyo necesario al próximo Presidente de la República y apostar por la reconciliación, luego de los conflictos y diferencias que distinguieron al pasado proceso político electoral, señaló ayer el canónigo Raúl Sosa Palos, vicario general de la Diócesis de Aguascalientes.
ES NECESARIO acatar el veredicto dictado por el TEPJF respecto a la
elección presidencial y brindar apoyo al próximo Presidente de México,
dijo ayer el canónigo Raúl Sosa Palos
En conferencia de prensa, en ausencia del Obispo José María de la Torre Martín quien se encuentra de vacaciones, apuntó que la jerarquía eclesiástica brinda su pleno respaldo a las instituciones ciudadanas encargadas de contar los votos y de revisar las impugnaciones, como fueron los casos del Instituto Federal Electoral (IFE) y del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).
"Expresamos nuestra sincera felicitación al ciudadano presidente electo de México y con sumo respeto hacemos también un llamado a los mexicanos para confiar en la honorabilidad en los miles de electores que de manera libre y voluntaria ejercieron su derecho libre y constitucional", indicó enseguida.
Acompañado del vocero del Obispado, sacerdote Carlos Alberto Alvarado Quezada, indicó que son válidas las muestras de rechazo al resultado de las elecciones presidenciales, dadas las supuestas irregularidades que imperaron en éste, además de que todo ciudadano es libre de expresar su punto de vista al respecto, pero con pleno respeto a los demás, sin llamar a la violencia y la confrontación.
"La prioridad es aceptar, siempre guardando la equidad, la justicia, el orden, el respeto", expresó el jerarca religioso.
Luego dio lectura a la postura oficial de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), al decir que "los Obispos de México reiteran su reconocimiento a la civilidad política y social de los ciudadanos mexicanos porque dimos un paso muy importante en la construcción de nuestra democracia cuando con interés y responsabilidad participamos en la fiesta electoral del 1º de julio, para elegir a nuestras autoridades de gobierno".
Hay que felicitar al pueblo de México por la ejemplar jornada electoral, que si bien no fue perfecta si fue auténtica, gracias a las garantías que ofrecieron antes, durante y después los organismos electorales de la República.
"También extendemos nuestra felicitación a la responsabilidad de los miles de funcionarios de casilla que junto con la alta participación del pueblo han contribuido al triunfo de la democracia del país", dijo.
Damos nuestro respaldo a las instituciones ciudadanas encargadas de dirigir el conteo de los votos y de revisar las impugnaciones como ha sido la tarea del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), para atender las demandas que por ley tienen derecho los partidos políticos, con la cual da la garantía del cuidado del voto de todos los mexicanos.
Ante el fallo que ha hecho el TEPJF, señaló Sosa Palos, "apelamos a la madurez democrática de los partidos y militantes para que la transición de gobierno marque los caminos que todo el pueblo de México anhela, a la altura de los tiempos políticos que demanda nuestra Patria, permitiendo el desarrollo oficial de la toma de protesta de nuestro nuevo presidente en paz y sin sobresaltos".
Con sumo respeto, la Iglesia Católica hace un llamado a todos los mexicanos para confiar en la honorabilidad de los miles de electores que de manera libre y voluntaria ejercieron su derecho constitucional al voto.
Asimismo "mantenemos la esperanza en que México, país de instituciones, mantiene su credibilidad e integridad de su sistema democrático ante el concierto de las naciones".
Por último, solicitó se haga un verdadero esfuerzo por lograr la reconciliación entre las distintas opciones políticas y en la medida de lo posible la integración de las ideas que potencien la grandeza de nuestro pueblo. Los ciudadanos no debemos dejarnos llevar por sentimientos o ánimos exacerbados de vencedores o vencidos; todos somos México; todos queremos el bien, el bienestar, el progreso y desarrollo nacional.
Fuente:
http://www.oem.com.mx/elsoldelcentro/notas/n2682457.htm
Mario Mora Legaspi
Aguascalientes, Ags.- La Iglesia Católica acepta y reconoce el fallo del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, por lo que es prudente brindar el apoyo necesario al próximo Presidente de la República y apostar por la reconciliación, luego de los conflictos y diferencias que distinguieron al pasado proceso político electoral, señaló ayer el canónigo Raúl Sosa Palos, vicario general de la Diócesis de Aguascalientes.
En conferencia de prensa, en ausencia del Obispo José María de la Torre Martín quien se encuentra de vacaciones, apuntó que la jerarquía eclesiástica brinda su pleno respaldo a las instituciones ciudadanas encargadas de contar los votos y de revisar las impugnaciones, como fueron los casos del Instituto Federal Electoral (IFE) y del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).
"Expresamos nuestra sincera felicitación al ciudadano presidente electo de México y con sumo respeto hacemos también un llamado a los mexicanos para confiar en la honorabilidad en los miles de electores que de manera libre y voluntaria ejercieron su derecho libre y constitucional", indicó enseguida.
Acompañado del vocero del Obispado, sacerdote Carlos Alberto Alvarado Quezada, indicó que son válidas las muestras de rechazo al resultado de las elecciones presidenciales, dadas las supuestas irregularidades que imperaron en éste, además de que todo ciudadano es libre de expresar su punto de vista al respecto, pero con pleno respeto a los demás, sin llamar a la violencia y la confrontación.
"La prioridad es aceptar, siempre guardando la equidad, la justicia, el orden, el respeto", expresó el jerarca religioso.
Luego dio lectura a la postura oficial de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), al decir que "los Obispos de México reiteran su reconocimiento a la civilidad política y social de los ciudadanos mexicanos porque dimos un paso muy importante en la construcción de nuestra democracia cuando con interés y responsabilidad participamos en la fiesta electoral del 1º de julio, para elegir a nuestras autoridades de gobierno".
Hay que felicitar al pueblo de México por la ejemplar jornada electoral, que si bien no fue perfecta si fue auténtica, gracias a las garantías que ofrecieron antes, durante y después los organismos electorales de la República.
"También extendemos nuestra felicitación a la responsabilidad de los miles de funcionarios de casilla que junto con la alta participación del pueblo han contribuido al triunfo de la democracia del país", dijo.
Damos nuestro respaldo a las instituciones ciudadanas encargadas de dirigir el conteo de los votos y de revisar las impugnaciones como ha sido la tarea del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), para atender las demandas que por ley tienen derecho los partidos políticos, con la cual da la garantía del cuidado del voto de todos los mexicanos.
Ante el fallo que ha hecho el TEPJF, señaló Sosa Palos, "apelamos a la madurez democrática de los partidos y militantes para que la transición de gobierno marque los caminos que todo el pueblo de México anhela, a la altura de los tiempos políticos que demanda nuestra Patria, permitiendo el desarrollo oficial de la toma de protesta de nuestro nuevo presidente en paz y sin sobresaltos".
Con sumo respeto, la Iglesia Católica hace un llamado a todos los mexicanos para confiar en la honorabilidad de los miles de electores que de manera libre y voluntaria ejercieron su derecho constitucional al voto.
Asimismo "mantenemos la esperanza en que México, país de instituciones, mantiene su credibilidad e integridad de su sistema democrático ante el concierto de las naciones".
Por último, solicitó se haga un verdadero esfuerzo por lograr la reconciliación entre las distintas opciones políticas y en la medida de lo posible la integración de las ideas que potencien la grandeza de nuestro pueblo. Los ciudadanos no debemos dejarnos llevar por sentimientos o ánimos exacerbados de vencedores o vencidos; todos somos México; todos queremos el bien, el bienestar, el progreso y desarrollo nacional.
Fuente:
http://www.oem.com.mx/elsoldelcentro/notas/n2682457.htm
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